Siempre es bueno saber sobre alimentación para mascotas, y en este caso sobre los gatos. Al igual que los perros son capaces de comer carroña, básicamente tienen una dieta rica en carnes (sobre todo en atunes) pero estos animales en su historia evolutiva tienen antecedentes de haber comido roedores como primer eslabón en su dieta, todo gracias a que su dieta se basa en cuanto a las proteínas que estos animales carnívoros necesitan para poder subsistir.
Los gatos poseen un sistema digestivo que está orientado al perfecto procesamiento de la carne, hueso y hasta las bacterias de una manera bastante eficiente y eficaz, pero ellos no son capaces de digerir los alimentos que tienen como mayor índice los carbohidratos, granos secos y vegetales, haciendo que sea imposible para ellos el poder comerlos.
Si los gatos comen alimentos ricos en carbohidratos, entonces tendrán problemas motrices como lo es el debilitamiento muscular y con él, también el debilitamiento del sistema inmunológico, lo que lo hace propenso a sufrir por toxinas, es por esto que deben de comer alimentos altamente ricos en proteínas.
Alimentos ricos en proteínas como pavo, pollo, ternera, y claro, existe la posibilidad de poder dar alimentos secos, siempre y cuando estos sean ricos en proteínas como se ha mencionado anteriormente, y claro, que tenga poco contenido vegetal, con un índice de carbohidratos menor al 10%.
El pescado puede ser una comida tradicional de los gatos, pero este debe de tener unos requisitos para que pueda dar resultados óptimos que nutran al animal, por lo que este debe de estar fresco y sobretodo crudo, pero existe un efecto contraproducente de este alimento, y es que al contener la enzima llamada “tiaminasa” destruye las vitaminas B1.
Si damos constantemente atún, también damos ácidos grasos poliinsaturados, siendo estos bastante peligrosos para el gato, estos gradualmente privan al organismo de la vitamina E lo que los hace propensos y susceptibles de padecer de esteatitis.